El danés Jonas Vingegaard, nuevo maillot amarillo del Tour de Francia, reconoció que trató de agrandar la distancia con el esloveno Tadej Pogacar atacándole en el Tourmalet, pero reconoció que su rival «tenía mejores piernas» que la víspera.
«Estoy muy contento de estar de nuevo en amarillo, me encanta este color, es el mayor símbolo de nuestro deporte, es algo enorme para mí», señaló el vencedor de la pasada edición, segundo en la meta de la sexta etapa a 25 segundos de Pogacar.
Estoy muy contento de estar de nuevo en amarillo, me encanta este color, es el mayor símbolo de nuestro deporte, es algo enorme para mí
«Pogacar ha tenido un día mejor, lo hemos intentado en el Tourmalet, pero ha resistido. Mi intención era distanciarle ahí, tenía a Wout Van Aert por delante para marcar el ritmo en el llano. Habría sido perfecto dejarle, pero tenía mejores piernas que ayer», agregó.
El danés reconoció que la lucha por la general sigue abierta: «Voy a disfrutar cada día, veremos lo que pasa al final».



